La Compañía

logo laviebel Casa fundada en 1992

Una película africana titulada La Vie Est Belle, me llevó al nombre de la compañía, con su sonoridad tranquila y evocadora.

Decir hoy LAVIEBEL es hacer una declaración de principios,
que encierra una sonrisa llena de ingenuidad consciente y de capas de tristeza por el mundo.

Laví un viejo tahúr judío y Bel una corista retirada.
Desde 1992 nos acompaña este nombre cargado de futuro.
Somos cabareteros libertarios.

2200 funciones que han visto mas de 500.000 espectadores por toda España.
Giras en Cuba, Colombia, México, Francia y Portugal.

26 premios de todos los calibres.
PREMIOS MAX. 3 veces finalistas al Mejor Espectáculo de Teatro Musical para CABARET LIQUIDO en 2010. Mejor Dirección Musical por LA BARRACA DEL ZURDO en 2011.
4 PREMIOS DE TEATRO MUSICAL DE MADRID, 5 PREMIOS DE TEATRO ANDALUZ, PREMIO EL PÚBLICO RTVA Mejor Compañía de Artes Escénicas de Andalucía, premios en Feten, Teatralia, Feria de Palma del Rio

25 años de actividad ininterrumpida. 29 espectáculos de creación propia que han ido construyendo un hilo narrativo paralelo a nuestras vidas. Cada espectáculo ha sido una aventura, a veces feliz, a veces dolorosa, pero siempre rica en experiencias.

A golpe de trabajo se ha ido conformando un sello: LAVIEBEL, que nos define y nos hace reconocibles:
teatralidad, lenguaje físico lleno de imágenes, intérpretes versátiles que cantan, bailan e interpretan con recursos muy variados, cercanía con el público, contraste de ambientes y emociones, reinterpretación del lenguaje contemporáneo, del universo del cabaret, el teatro musical, la barraca de atracciones…

Un coctail impuro de sabor agridulce.

Nuestro reto permanente es mostrar en cada nuevo proyecto otras caras de ese lenguaje, de abrirlo en canal y renovarlo. Hacemos “Teatro Popular de Vanguardia”, para llegar al público por via directa y a la vez abrir su mirada, buscando caminos nuevos sin perder de vista la tradición.

25 años llenos de momentos de optimismo y buenas noticias y otros en los que parece que todo se viene abajo, en un acto constante de RESISTENCIA.
Resistencia en el oficio, en la curiosidad y la alegría. Un largo viaje que continúa. Cada año un poco más jóvenes.
Miramos el futuro siempre con nuevos proyectos y cambios de rumbo en este misterioso mar de las cosas por hacer.

Emilio Goyanes